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19.May.2013 / 08:45 pm / Haga un comentario

Desde el 15 de febrero pasado, advertí acerca de la necesidad de Auditar el SITME, entiéndase, un mecanismo que se creo desde el Banco Central de Venezuela, para que , a partir de deuda de la República, se emitieran títulos valores, que eran entregados por la banca venezolana, sin que mediara el control, ni el destino final de estas divisas.

La oligarquía comercial y financiera de este país, esa que pega el grito a l cielo con el tema económico de la nación, son los principales beneficiarios de se mecanismo, sin que hasta la fecha hayan rendido cuentas de que hicieron con estas divisas que son de todas y todos los venezolanos.

Quienes han soslayado este tema, pecan de ingenuos o cómplices. Las cantidades de divisas liquidadas por esta vía, son de dimensiones importantes y forman parte del problema de escasez estructural y artificial que atravesamos. Es decir, quienes recibieron dólares por esta vía, debían traer al país, los insumos, materias primas y productos que hoy nos hacen falta en Venezuela.

El SITME nació como un mecanismo alterno a Cadivi, debido a la satánizacion que se hizo de Cadivi, por el tema de los controles previos y posteriores que allí existen. Una de las excusas mas recurrentes era el tiempo que se retardaba, que si las cartas de crédito, que si los proveedores externos y un largo etc. Se dieron miles de explicaciones para estructurar el SITME y ante el fracaso del mismo, nadie rinde balance y los beneficiarios (en su mayoría adversos a este «régimen» )no han dicho esta boca es mía.

Insisto en este tema, pues allí vamos ha encontrar,  parte de la explicación a la escasez de alimentos, medicinas, insumos y repuestos que se presenta del país y vamos a conocer el rostro de quienes cometieron semejantes tropelías.

De igual forma deberíamos empezar a explorar e instrumentar los mecanismos que nos permitan RECUPERAR para la REPÚBLICA todos las divisas extraídas de forma fraudulenta, y donde se demuestre que fueron a engrosar el patrimonio de quienes las solicitaron para importar bienes y productos y nunca los colocaron en puertos venezolanos.

No se trata de cualquier auditoria que logre validar el motivo de la solicitud de divisas que miles de empresas y personas hicieron vía SITME. Sino de verificar el destino, la prueba de que esa mercancía  ingreso al País, las ventas, el inventario -si es que existe- los impuestos que pagaron a la nación y el precio final de venta a los venezolanos, para determinar el margen de utilidad y ver si esa utilidad fue declarada al fisco nacional.

En el marco de la cruzada contra la impunidad, el tema de quienes solicitaron divisas y no demuestren que entraron al país para los fines que se liquidaron, debe ser castigado con todo el peso de la ley y que se olviden los oposicionistas venezolanos de andar solicitando la eliminación de la Ley Contra los Ilícitos Cambiarios, por el contrario, todo espeso del Estado para quienes sean los responsables.

 

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